POR LEONARDO PLATA
BARAHONA: La medallista olímpica, Jessica Oviedo, de 25 años, quién obtuvo la presea de bronce en Los Juegos Centroamericano y del Caribe Barranquilla 2018, expresó que es un orgullo para ella representar el país y su natal Barahona en los eventos deportivos internacionales, en los que le ha tocado participar como atleta de alto rendimiento.
Oviedo, dice que tanto ella como los demás atletas pobres que se entregan entero para salir airosos en las competencias deportivas internacionales en que ven acción, son de origen humildes.
No obstante, explicó que a estos no se le da apoyo, ayuda, ni motivaciòn, para que puedan seguir manteniendo en alto la Bandera Dominicana en playas extranjeras, algo, que a su juicio, afecta la moral de estos jóvenes, que provienen de familias de muy bajos ingresos económicos.
Oviedo, ganadora de varias melladas, entre estas oro, plata y bronce, en otros eventos deportivos nacionales, mundiales y Panamericanos, dijo que particularmente a ella y su familia nunca nadie las ha tomado en cuenta, ni dado apoyo, lo que indica la indiferencia y apatía del Estado dominicano, empresarios, instituciones y de la gente que puede ayudar.
“Mi sueño dorado es sacar a mi familia de la pobreza en que vive, darle un techo digno a mi madre, para que pueda vivir dignamente como merece vivir un ser humano”, comentó visiblemente apenada Jessica Oviedo.
La medallista, nacida y criada en el sector Nuevo Amparo (antiguo Jarro Sucio) del distrito municipal de Villa Central, reveló que en Barahona nadie se le ha acercado, ni siquiera para motivarla, cosa que lamenta en el alma.
“Es lamentable que nadie motive ni ayude a un atleta que lo da todo en competencias deportivas internacionales para dignamente mantener en alto el nombre de su paìs y su pueblo en playas extranjeras, con el objetivo también de sacar de la pobreza a su familia residente en el pueblo que lo vio nacer”, dijo Oviedo.
Finalmente, la medallista olímpica solicitó al presidente Danilo Medina tomarla en cuenta, junto a su familia, que atraviesan por serias precariedades económicas en el empobrecido sector Nuevo Amparo del distrito municipal de Villa Central, donde residen, producto del estado de miseria en que se desenvuelven.
