Por Betty Matos.-
Barahona.- El obispo emérito de Barahona, Monseñor Rafael Leonidas Felipe Núñez, expresó sentirse pequeño para continuar la misión que dejó el fenecido sacerdote Fabio Mamerto Rivas Santos en la Región Suroeste del país.
Declaró que inició su sacerdocio junto a Rivas Santos en la Catedral de Santo Domingo, el 25 de marzo del año 1965, al expresar que desde ahí arrancó una cercanía entre ellos hasta el día de su muerte.
Manifestó que a través del trato, la prensa y los demás medios, creció el ministerio y trabajo de Monseñor Rivas Santos en Barahona. Dijo que cuando le tocó llegar a Barahona, su actitud fue continuar toda la labor que Mamerto Rivas venia realizando “por lo natural no igual que Rivas Santos, porque cada uno tiene personalidades”, pero le dio la continuidad a esa misión que él estaba realizando.
Expresó, que continúo todos los organismos de las obras sociales que se estaba realizando en ese momento cuando le tocó el cambio de venir a la región. Se reunió fiel cada mes con el Consejo de Directores visitando los proyectos que se llevaban a cabo tratando de conseguir medio para que continuara adelante el propósito de realizar el desarrollo del Suroeste.
Dijo que estaba en el Centro de Promoción Campesina la cual venía desde ante con el obispo y se acercó para dar todo lo que estuviera a su alcance a esa y las demás, como en el caso del Instituto Católico Tecnológico de Barahona (LICATEBA) que formaba parte de ese proceso de desarrollo de los futuros dirigentes de la región formando profesionales, donde dijo llegó un momento que los estudiantes no solo querían un título tecnológico sino también querían ser licenciados, por lo que se formó de la Universidad Católica Tecnológico de Barahona (UCATEBA).
