POR JOSE VALENTIN
Para incitar al caos, al desorden, quemar gomas en las principales calles del Municipio, dañar el asfalto, tumbar las redes del tendido eléctrico, apedrear la Policía Nacional y con ello desatar su ira, obligándoles a disparar a quemarropa y luego solo quede el lamento de los heridos y el daño irreparable a todo aquello que hemos conseguido con tanto sacrificio y esfuerzo.
Quien incita a una huelga o movilización debe dar la cara y ser responsable de cualquier hecho lamentable que pueda acontecer en nuestro pueblo.
Ya las huelgas de piedra, bombas y encendidos de neumático es cosa del pasado. Las luchas de hoy se deben librar con propuestas e iniciativas reales.
Marchemos al Palacio Nacional o a la Gobernación, pero no incitemos al caos mediante las redes sociales, pues al final nadie es tan descabezado para lanzarse a las calles y perder más por lo menos.
En los años ochenta, los pequeños grupo de izquierda que aún suscitaban en nuestro pueblo, eran jóvenes responsables, que daban la cara y luchaban por una causa común, no un personaje de las redes sociales , sin valor, ni filosofía.
¿Ese es el líder a seguir, una persona que nadie sabe quién es, un agitador cibernético carente de ideología? Es muy bueno llamar al desorden y luego nadie fue.
¿Qué pasaría si en esa huelga violenta que propone “UNO” suscitan hechos lamentables?
¿Acaso, dará la cara y se solidarizará con el o los heridos?
¡NO, Seguirá escondido, como lo ha hecho hasta ahora, agachado tras la cortina!
Ser líder conlleva sacrificios y mucho. No es escondido, es dando la cara y combatiendo codo a codo con el pueblo.
Tato, Rafael, Obispo, Lito Santana, Gambao, Máximo Mamita, Los Cuaberos, Eusebio, Edita (Fallecido) Musulino, Yaque, y muchos más, cuando decidieron lanzarse a la calle de Tamayo, lo hicieron con responsabilidad, con la cara expuesta y el pecho al aire. Esos sí que eran dignos de respeto en su momento, que hoy abrazaron otra causa, eso es harina de otro costal, PERO NO UN CARAJO A LA VELA QUE NADIE SABE QUIEN ES.
Estoy de acuerdo con las protesta, pero pacifica y que los organizadores estén al frente.
Hasta tanto no tendrá el respeto de nadie y solo se verá como un agitador, resentido social, que no busca el bien de Tamayo, sino llevar todo al plano político, beneficiando un sector y tratando de perjudicar otros.
USTED QUIERE QUE LO SIGAN, PUES DE LA CARA.