AZUA: Empleados de la compañía brasileña constructora Andrade Gutiérrez que trabajan en la construcción de la presa Monte Grande, denuncian que todavía es la fecha que no han pagado, por lo que están pasando un momento difícil para la alimentación de su familia.
Manifestaron que hace trece días que la compañía paralizó los trabajadores, para que ellos como empleados cumplan la cuarentena y así evitar la propagación del COVID-19.
Expresaron que aproximadamente mil empleados esperan con ansias el pago para poder comprar alimentos a sus hijos y evitar que mueran de hambre.
Además expresaron que tampoco le han pagado los bonos de este año y ahora más que nunca necesitan el pago por el mal momento que atraviesa el país.
“Nos sentimos abandonados por la compañía, no podemos salir de la casa y no tenemos dinero del trabajo que realizamos” así finalizó diciendo uno de los empleados.
