POR MANUEL DEL CABRAL.
Juan Pablo,
En nuestra isla tú pusiste en su sitio
La tierra,
El agua,
La palabra.
Pero, Juan Pablo:
No podemos enterrarte
Porque no tenemos agua.
Hoy ni te respiramos,
Porque el aire:
Lo negocian los jueces ya vendidos.
Hoy sólo te pensamos
Porque la palabra cuela en el museo.
Y como todas las paredes
Son del amo,
Tu foto la clavamos en el grito.
Pero aun a oscuras
Como la novia oculta
Nos ponemos de acuerdo.
Porque los ojos
No los tenemos en la cara
Porque la luz
No está en su sitio.
Pero nos queda una lámpara
La sonrisa de los niños.
Ya ves, Juan Pablo
La noche no es tan larga:
La mañana en el pecho
No nos deja dormir.