POR ÁGUEDA RAMÍREZ DE RODRÍGUEZ,
para Ecos del Sur.
Como una “artista de la educación” la calificaba su hija Zoila, pues Doña Sara, durante se desempeñó como Maestra, tuvo la virtud de hacer ver al estudiante como fácil lo que él creía muy difícil.
Movida por la vocación y graduada de Maestro Normal, se inicia como Maestra en 1943, laborando en los niveles Primario y Secundario por espacio de 39 años, durante los cuales se distinguió por su dedicación y amor por sus alumnos, inspirando en todos ellos el mayor respeto.
Dotada de gran inteligencia y con gran dedicación, juntamente con la crianza de los hijos y el trabajo como Maestra Doña Sara realizó estudios universitarios en la extensión de la UASD en esta ciudad, obteniendo el título de Profesor en Matemáticas.
Nacida en Barahona del matrimonio de Doña Altagracia Ramírez y de Don Rómulo Silverio Suero el 22 de mayo de 1922, no se sabe por qué le dicen Sara. En 1945 contrajo matrimonio con Don Manuel Eduardo González Féliz, con quien procreó tres hijos y crió otros tres de él, hoy todos profesionales.
Retirada de la vida pública tras ser jubilada como Maestra, reside en la ciudad de Santiago de los Caballeros en compañía de uno de sus hijos, donde aún ayuda con las matemáticas a nietos y a otros quienes necesitan de su arte.
Como una “artista de la educación” la calificaba su hija Zoila, pues Doña Sara, durante se desempeñó como Maestra, tuvo la virtud de hacer ver al estudiante como fácil lo que él creía muy difícil.
Movida por la vocación y graduada de Maestro Normal, se inicia como Maestra en 1943, laborando en los niveles Primario y Secundario por espacio de 39 años, durante los cuales se distinguió por su dedicación y amor por sus alumnos, inspirando en todos ellos el mayor respeto.
Dotada de gran inteligencia y con gran dedicación, juntamente con la crianza de los hijos y el trabajo como Maestra Doña Sara realizó estudios universitarios en la extensión de la UASD en esta ciudad, obteniendo el título de Profesor en Matemáticas.
Nacida en Barahona del matrimonio de Doña Altagracia Ramírez y de Don Rómulo Silverio Suero el 22 de mayo de 1922, no se sabe por qué le dicen Sara. En 1945 contrajo matrimonio con Don Manuel Eduardo González Féliz, con quien procreó tres hijos y crió otros tres de él, hoy todos profesionales.
Retirada de la vida pública tras ser jubilada como Maestra, reside en la ciudad de Santiago de los Caballeros en compañía de uno de sus hijos, donde aún ayuda con las matemáticas a nietos y a otros quienes necesitan de su arte.