POR FRANCISCO ESPEJO
Para Ecos del Sur
NEIBA, Baoruco.- El diputado Rafael Méndez consideró como necesaria y urgente tomar medidas sanitarias en la frontera, como forma de impedir en contagio y proliferación de enfermedades en el país.
El legislador saludó el anuncio de las autoridades del ministerio de Salud Pública por establecer una “barrera” sanitaria que permita examinar y vacunar a las personas que cruzan la franja fronteriza e impedir la entrada de determinadas enfermedades.
“Es sumamente importante que se tomen mayores controles en la frontera, como parte de un conjunto de acciones para fortalecer y transparentar las actividades comerciales entre ambos países”, estimó.
En otro orden, Méndez abogó para que sectores empresariales y autoridades, dominicanas y haitianas, definan, a la mayor brevedad posible, un protocolo en relación al comercio de productos y despejar los obstáculos que impiden el normal flujo comercial.
Recordó que República Dominicana y Haití son dos naciones hermanas, que tienen el deber de mantener relaciones armoniosas, en el marco del respeto pleno a la soberanía nacional, los derechos humanos y los acuerdos internacionales.
Indicó que con la veda impuesta por las autoridades haitianas a los productos dominicanos, los más perjudicados son los sectores más pobres de Haití, así como los comerciantes dominicanos, que exportan bienes de gran demanda en esa población.
Para Ecos del Sur
NEIBA, Baoruco.- El diputado Rafael Méndez consideró como necesaria y urgente tomar medidas sanitarias en la frontera, como forma de impedir en contagio y proliferación de enfermedades en el país.
El legislador saludó el anuncio de las autoridades del ministerio de Salud Pública por establecer una “barrera” sanitaria que permita examinar y vacunar a las personas que cruzan la franja fronteriza e impedir la entrada de determinadas enfermedades.
“Es sumamente importante que se tomen mayores controles en la frontera, como parte de un conjunto de acciones para fortalecer y transparentar las actividades comerciales entre ambos países”, estimó.
En otro orden, Méndez abogó para que sectores empresariales y autoridades, dominicanas y haitianas, definan, a la mayor brevedad posible, un protocolo en relación al comercio de productos y despejar los obstáculos que impiden el normal flujo comercial.
Recordó que República Dominicana y Haití son dos naciones hermanas, que tienen el deber de mantener relaciones armoniosas, en el marco del respeto pleno a la soberanía nacional, los derechos humanos y los acuerdos internacionales.
Indicó que con la veda impuesta por las autoridades haitianas a los productos dominicanos, los más perjudicados son los sectores más pobres de Haití, así como los comerciantes dominicanos, que exportan bienes de gran demanda en esa población.
