para Ecos del Sur.
Gracias a la Liga “Liquito Hernández” y a su fundador Carlos Fernández, Barahona y la República Dominicana se encuentran en el Museo Municipal de Pequeñas Ligas en el Wiliam Sport en Pensilvania (Filadelphia), al igual que en el Almanaque Mundial de Deportes.
El 4 de noviembre de 1959 nace en Barahona, hijo de Don Ramón Fernández y de Doña María A. Hernández, tercero de seis hermanos. En 1987 contrajo matrimonio con la Señorita Belkis Nivar, con quien ha procreado a Wellington y a Jerilys.
Los estudios primarios los cursó en la escuela “Cristo Rey” del sector SAVICA, donde a la edad de 8 años mostró inquietud por el béisbol, deporte en el cual se destacó como lanzador para los equipos “Los Gemelos” y “Compra Venta Joselito”. Cursó los estudios secundarios en el liceo “Dr. Federico Henríquez y Carvajal” entre 1976 y 1981, donde fue un destacado dirigente estudiantil. Otro de sus entretenimientos era el básquetbol, deporte que solía disfrutar en el Club Deportivo SAVICA.
Desde los 14 años fue anotador y compilador de béisbol y de Softbol, y en 1981 se graduó de Anotador profesional. En ese mismo año fue Anotador en los V Juegos Nacionales efectuados en esta ciudad de Barahona, Anotador de la Liga Profesional del Sur, en la cual participaron los equipos Diablos Rojos de Barahona, Azucareros del Este, Brujos de San Juan y Caimanes del Sur, miembro fundador de la Asociación de Árbitros y Anotadores de Barahona y de la Asociación Dominicana de Árbitros y Anotadores. En 1979 brilló notablemente como campeón de la región Suroeste de Atletismo en los 100 Metros Planos, representando a la región como Corredor número 1 en esa categoría en los Juegos Nacionales de ese año en San Francisco de Macorís y en ese mismo año tuvo el honor de recibir a la entrada de esta ciudad la antorcha de los Juegos Nacionales.
Carlos M. Hernández -Lilín o Liquito- se destacó como miembro fundador de la Liga Deportiva “Liquito Hernández”, la cual se inició el 21 de mayo de 1980 con tres equipos, llegando a contar con 17, compuestos por niños entre las edades de 7 años hasta amateur AA, siendo también el creador de la Categoría Merengue, de 7 a 9 años, entre los cuales se encontraban: Almacén Minaya, Almacén Fellito, Empresas Lagares y Persio Uniformes. El reglamento para pertenecer a esta categoría era estar asistiendo a alguna escuela, con lo que se logró que quienes no lo hacían lo hicieran con ayuda de la Liga, que consistió en obsequiar a los niños útiles y uniformes escolares.
Desde 1980 hasta la fecha, la Liga ha logrado tres campeonatos nacionales de Pequeñas Ligas, llegando a representar a la República Dominicana en competencias internacionales en Aruba, Curazao, Venezuela y Estados Unidos. En 1983 logró invicto el Campeonato Nacional de Pequeñas Ligas, representando al país en el Campeonato Latinoamericano. En el mismo año representó a Latinoamérica en el Campeonato Mundial de Pequeñas Ligas en Pennsylvania, llegando a ser subcampeones mundiales, el más grande galardón logrado por un equipo de béisbol en la historia del deporte de pequeñas ligas de la República Dominicana, poniendo así en alto el nombre de Barahona y del país.
En Nueva York, ciudad donde se radicó en 1983, Carlos Fernández fue miembro de la Asociación de Árbitros “Williamsburg Up and Down” desde 1985 hasta 1987, siendo distinguido en 1985 por esa institución como Novato del Año por su destacada labor como Árbitro, y desde allí ha seguido contribuyendo con el deporte de su natal Barahona. Allí cursó estudios de Inglés Básico en la escuela “Solidaridad Humana”, y en la Universidad Eugenio María de Hostos cursó estudios superiores, donde se graduó de Técnico en Contabilidad y donde cursó una especialidad en el área de los impuestos. En esa institución tuvo la oportunidad de poner de manifiesto su liderazgo como Presidente de la Asociación de Estudiantes Dominicanos, desarrollando varios proyectos de ayuda a la comunidad estudiantil dominicana del sur del Bronx.
Carlos Fernández ha participado en grupos de apoyo al pueblo de Barahona, a saber: Comité de Apoyo al Municipio de Barahona en Nueva York; Fundación pro-Desarrollo de Barahona y Asociación de Barahoneros Ausentes en Nueva York. Entre las ayudas al pueblo de Barahona gestionadas por estos grupos se destacan: una camioneta, computadoras y muebles de oficina para el Ayuntamiento Municipal; útiles deportivos, Etc. En 1990 fue declarado “Hijo Distinguido” del Municipio de Barahona, mediante Resolución # 36-90 del Ayuntamiento Municipal, del 7 de noviembre del mismo año. A inicios del año 2013, en reconocimiento a su labor empresarial, la Asociación de Preparadores Latinos de Impuestos (LATAX por sus siglas en inglés) le otorgó un reconocimiento junto a otros quince preparadores afiliados a esa entidad.
En la actualidad (2013), Carlos Fernández se dedica al negocio de agente de viajes y servicios múltiples, desde los cuales presta ayuda y orientación a sus compueblanos en las áreas de impuestos e inmigración. Por su gran espíritu de superación y de colaboración, es muy querido y admirado por todos cuantos lo conocen.