BARAHONA.- Para María Montez el hecho enaltecedor de ser considerada “La Sirena de Hollywood” por los cronistas de cine de los años 40 significa, entre otros atributos, que su escultural figura se destacaba sobre las de las demás actrices y divas de la época.
Téngase en cuenta que no se contaba entonces con los avances actuales de las cirugías plásticas ni las técnicas modernas de entrenamiento físico, lo que constituye una cualificación que realza el carisma de la sin par Montez en su estatus de estrella de cine.
En ese marco, es oportuno resaltar que en 1947 los productores de la última película estadounidense de María Montez, “Siren of Atlantis”, de United Artists, dirigida por Arthur Ripley y Gregg C. Tallas, escogieron este nombre para esa película con el propósito de “capitalizar” el título de “Sirena de Hollywood”.
Recuérdese que ese calificativo se le había concedido a la Montez por primera vez en sus inicios en Hollywood, luego de que asumiera el rol de “Reina de la Selva” como protagonista del filme “South of Tahiti”, dirigida por George Waggner en 1941.
Por su parte, “Siren of Atlantis” fue la primera película en que María Montez contó como co-protagonista con Jean Pierre Aumont (su esposo), ambos actuando como actores independientes. A pesar de todos los augurios de éxito de la cinta, su realización y “post-producción” fue considerada como “tormentosa”, determinados analistas de cine de la época y contemporáneos señalan que la Montez al ganar un juicio a la Universal Pictures y romper su contrato con esa importante empresa cinematográfica en forma no amistosa, subestimó las repercusiones de esos hechos en su carrera.
Téngase en cuenta que no se contaba entonces con los avances actuales de las cirugías plásticas ni las técnicas modernas de entrenamiento físico, lo que constituye una cualificación que realza el carisma de la sin par Montez en su estatus de estrella de cine.
En ese marco, es oportuno resaltar que en 1947 los productores de la última película estadounidense de María Montez, “Siren of Atlantis”, de United Artists, dirigida por Arthur Ripley y Gregg C. Tallas, escogieron este nombre para esa película con el propósito de “capitalizar” el título de “Sirena de Hollywood”.
Recuérdese que ese calificativo se le había concedido a la Montez por primera vez en sus inicios en Hollywood, luego de que asumiera el rol de “Reina de la Selva” como protagonista del filme “South of Tahiti”, dirigida por George Waggner en 1941.
Por su parte, “Siren of Atlantis” fue la primera película en que María Montez contó como co-protagonista con Jean Pierre Aumont (su esposo), ambos actuando como actores independientes. A pesar de todos los augurios de éxito de la cinta, su realización y “post-producción” fue considerada como “tormentosa”, determinados analistas de cine de la época y contemporáneos señalan que la Montez al ganar un juicio a la Universal Pictures y romper su contrato con esa importante empresa cinematográfica en forma no amistosa, subestimó las repercusiones de esos hechos en su carrera.
