PRÁXEDES MAGALYS OLIVERO G.
Para Ecos del Sur
El Padre Rogelio Cruz llegó a nuestra Ciudad Universitaria la tarde del sábado 19 de septiembre.
Mientras veía y escuchaba al Padre Rogelio sólo se me ocurrió pensar en la necesidad de que en nuestro país se levanten más padres y madres Rogelios ¡Cuánta energía! ¡Cuánto coraje! ¡Cuánta gallardía! ¡Cuánto compromiso con la Patria!
Ver y escuchar al Padre Rogelio es contagiarse de su convencimiento de que debemos luchar por la preservación de nuestros recursos naturales. Verlo y escucharlo es comprender que es posible un mejor país, siempre y cuando defendamos con uñas y dientes el respeto a lo nuestro.
Me pregunté, en ese momento: “¿Cómo es posible que un hombre de tanta virtud sea recibido con tan pocos honores? ¿Dónde están los representantes del Honorable Ayuntamiento de Barahona que no han venido a entregarle la declaración de visitante distinguido, como así corresponde? ¿Por qué tanta descortesía? ¿Por qué tanta indiferencia?”
Ante tan grave falta, no me queda más, a mí, Práxedes Magalys Olivero G., con todas las atribuciones que me confiere el hecho de ser un ser humano, dominicana, barahonera, campesina y amante de la naturaleza, dictar la siguiente disposición:
Artículo 1: Declarar, como al efecto declaro, al Padre Rogelio Cruz, ciudadano de este País y del mundo, huésped distinguido del municipio de Barahona, la Perla del Sur.
Artículo 2: Disponer, como al efecto dispongo, la entrega de las Llaves de la Ciudad de Barahona, de tal manera que el Padre Rogelio Cruz pueda entrar y salir cuantas veces lo crea conveniente.
Publíquese y cúmplase.
Dado en la ciudad de Barahona, a los 19 días del mes de septiembre del 2014.
