Nota enviada a Ecos del Sur
BARAHONA.-El dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Víctor Mateo Vásquez, consideró que la unidad de la organización morada no está en juego, por que la disciplina siempre ha reinado a lo interno.
“Que nadie apueste a que una fiesta democrática como la que se vive a lo interno del PLD, se pueda se convertir en una catástrofe como auguran los contrario, pues el PLD se ejerce un liderazgo responsable ante la sociedad dominicana y no la defraudará”, dijo Mateo Vásquez.
Estas declaraciones fueron emitidas por el dirigente peledeísta en el marco del debate en torno a los posicionamientos de figuras a lo interno del PLD, así como el tema de la reelección.
El dirigente político aseveró “que el PLD ha sabido actuar cónsono a la realidad nacional y en ese sentido, el 2016 será una nueva oportunidad para que el país pueda elegir entre el progreso, el avance y el desarrollo, por un lado; mientras que por el otro, la vuelta al poder del retroceso, la vergüenza y la calamidad que hace poco más de una década vivió República Dominicana”.
BARAHONA.-El dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Víctor Mateo Vásquez, consideró que la unidad de la organización morada no está en juego, por que la disciplina siempre ha reinado a lo interno.
“Que nadie apueste a que una fiesta democrática como la que se vive a lo interno del PLD, se pueda se convertir en una catástrofe como auguran los contrario, pues el PLD se ejerce un liderazgo responsable ante la sociedad dominicana y no la defraudará”, dijo Mateo Vásquez.
Estas declaraciones fueron emitidas por el dirigente peledeísta en el marco del debate en torno a los posicionamientos de figuras a lo interno del PLD, así como el tema de la reelección.
El dirigente político aseveró “que el PLD ha sabido actuar cónsono a la realidad nacional y en ese sentido, el 2016 será una nueva oportunidad para que el país pueda elegir entre el progreso, el avance y el desarrollo, por un lado; mientras que por el otro, la vuelta al poder del retroceso, la vergüenza y la calamidad que hace poco más de una década vivió República Dominicana”.
