POR TOMAS AQUINO MENDEZ
En una conversación personal, con un funcionario del gobierno, sobre las razones para que los residentes en el Suroeste no tengamos casi lista la presa de Monte Grande, este me justificó el retraso en “la falta de recursos”. Yo no le compré esa idea.
En una conversación personal, con un funcionario del gobierno, sobre las razones para que los residentes en el Suroeste no tengamos casi lista la presa de Monte Grande, este me justificó el retraso en “la falta de recursos”. Yo no le compré esa idea.
Le dije que tal vez era porque Pedernales, Independencia, Baoruco y Barahona no tenían tantos votantes como otras regiones o porque nadie quiere “vincularse” mucho con la pobreza o quizás los suroestanos TODOS carecemos de una visión unitaria para luchar “en forma” por nuestras necesidades.
Claro, él rebatió mis posiciones y me reiteró que el problema se sustenta en que no hay recursos en las arcas del Estado.
Le respondí que esa mentira no era verdad. Que de ser así la obra no se realizaría nunca, porque el dinero siempre escasea.
Veo falta de voluntad para ejecutar el proyecto. Sino, vean estos ejemplos: ¿Por qué la circunvalación que va de Haina a Boca Chica, entregada a un líder político vía ingenieros amigos de ese, nunca se detiene.
Cómo es que aparecen millones para regularizar extranjeros a quienes ni su país se ocupa de dotarlos de un papel de identidad. Porque a tantas ONG, que nadie sabe lo que hacen, se le entregan millones cada mes.
De dónde surgen millones de pesos para reacondicionar el Estadio Cibao, recién incendiado, mientras Monte Grande cierra campamentos por falta de recursos? -Bueno, es cuestión de prioridad, me dijo el amigo funcionario.
Eso quiere decir que Monte Grande, que motivó al presidente a dar un picazo de inicio hace casi dos años, no está en planes reales de las autoridades. Todo ha sido un “aguaje” para conformar a los residentes en la región.
El alegato de falta de recursos no es real. Es cuestión de querer y de tomar en cuenta a más de 500 mil dominicanos que habitan la región más pobre del país.
Quiero que no me interpreten mal. No estoy en contra de la circunvalación, ni del plan de regularización de extranjeros o que se acondicione el Estadio Cibao. Pero, para mí, Monte Grande SI es una verdadera prioridad.
La hemos bautizado como el Metro del Sur. Esa obra sacará del peligro de morir ahogadas a miles de familias cada año por el desbordamiento del Yaque del Sur, más de 400 mil tareas se incorporarían a la producción y se garantizaría agua para el consumo y el regadío.
Por eso digo que no hay voluntad, porque QUERER ES PODER. ¡Manos a la obra, presidente¡ concluya Monte Grande YA
