Los acuerdos políticos que hubo de darse para asegurar que la reforma constitucional del 2015 pasara sin traumas, primero por el Congreso de la República, y luego por la Asamblea Nacional Revisora, han frenado el activismo que hasta el momento se venía dando en el Partido de la Liberación Dominicana.
Y es comprensible que así sea puesto que todavía la alta dirección del PLD no ha dicho oficialmente lo que hay en torno a los acuerdos arribados con las organizaciones políticas del país.
El Partido Reformista social Cristiano ha dicho que no existen acuerdos con el de la Liberación Dominicana, aunque se conoce que sus diputados votaron a favor de la modificación de la Constitución de la República lo que lleva a actuar con cautela frente a ese pronunciamiento del presidente del PRSC.
Aunque no se conocen sus alcances inmediatos, pero el acuerdo número 3 entre Leonel y Danilo establece “hacer reservas” de las candidaturas a la senaduría y de la Cámara de Diputados que ostentan actualmente los compañeros y compañeras en ejercicio.
El PRD anunció unos acuerdos político-programáticos que el Presidente de la República en su reciente alocución al país implícitamente refrendó al referirse al por qué debía repostularse por cuatro años más.
Lo que está claro es el apoyo con que contará el Presidente Danilo Medina para ser reelecto por cuatro años más, no así lo que tiene que ver con las candidaturas congresuales y municipales, niveles electivos en los que todavía no hay una dirección inequívoca que permita establecer con claridad el comportamiento de los aspirantes a cargos electivos en el PLD, lo que, en consecuencia, ha generado que muchos compañeros continúen en actividades proselitistas.
Mientras se espera a que el Partido defina las plazas disponibles para los compañeros no se puede caer en un estado de inercia que a la postre haría más daño que bien a los intereses generales del PLD.
En todas partes los compañeros están en promoción de sus aspiraciones y en Barahona el proselitismo de los aspirantes a la alcaldía, del ingeniero Pedro Peña Rubio a la senaduría, de los regidores y de los aspirantes a directores de distritos municipales, no puede ser visto como insubordinación, de “que no se está acatando las líneas del Partido”, porque todavía el Partido no ha dicho oficialmente qué es lo que hay.
Y es comprensible que así sea puesto que todavía la alta dirección del PLD no ha dicho oficialmente lo que hay en torno a los acuerdos arribados con las organizaciones políticas del país.
El Partido Reformista social Cristiano ha dicho que no existen acuerdos con el de la Liberación Dominicana, aunque se conoce que sus diputados votaron a favor de la modificación de la Constitución de la República lo que lleva a actuar con cautela frente a ese pronunciamiento del presidente del PRSC.
Aunque no se conocen sus alcances inmediatos, pero el acuerdo número 3 entre Leonel y Danilo establece “hacer reservas” de las candidaturas a la senaduría y de la Cámara de Diputados que ostentan actualmente los compañeros y compañeras en ejercicio.
El PRD anunció unos acuerdos político-programáticos que el Presidente de la República en su reciente alocución al país implícitamente refrendó al referirse al por qué debía repostularse por cuatro años más.
Lo que está claro es el apoyo con que contará el Presidente Danilo Medina para ser reelecto por cuatro años más, no así lo que tiene que ver con las candidaturas congresuales y municipales, niveles electivos en los que todavía no hay una dirección inequívoca que permita establecer con claridad el comportamiento de los aspirantes a cargos electivos en el PLD, lo que, en consecuencia, ha generado que muchos compañeros continúen en actividades proselitistas.
Mientras se espera a que el Partido defina las plazas disponibles para los compañeros no se puede caer en un estado de inercia que a la postre haría más daño que bien a los intereses generales del PLD.
En todas partes los compañeros están en promoción de sus aspiraciones y en Barahona el proselitismo de los aspirantes a la alcaldía, del ingeniero Pedro Peña Rubio a la senaduría, de los regidores y de los aspirantes a directores de distritos municipales, no puede ser visto como insubordinación, de “que no se está acatando las líneas del Partido”, porque todavía el Partido no ha dicho oficialmente qué es lo que hay.