Por Octavio Féliz Vidal
Las reglas en una familia definen que se puede y que no se hacer en el sistema. En ocasiones son claras y explícitas como la hora de dormir es a las 10 pm. Otras no son explícitas o en ocasiones hay áreas o temas que no están reguladas o que los miembros no tienen claro cuál es la opinión del sistema familiar.
La tecnología es la aplicación práctica de la ciencia. Es ciencia aplicada. Permite facilitar procesos. La tecnología facilita la vida. Un ejemplo son los celulares y computadoras que fascinan a niños, adolescentes y adultos.
Hablamos de abuso a la tecnología cuando su uso excesivo afecta las relaciones del individuo. Afecta a sus relaciones familiares, de pareja y con los amigos y el trabajo. El abuso de la tecnología distrae a la gente de sus responsabilidades sociales y laborales. En ocasiones se dedica tanto tiempo que los jóvenes descuidan la socialización con los demás. Descuidan la alimentación, la higiene y se tornan desorganizados e irritables.
El abuso podría llegar a la adicción con dependencia psicológica y fisica. La falta del equipo y sus aplicaciones genera ansiedad y síntomas físicos, como cefalea, irritabilidad. etc.
Poner algunas reglas puede ayudar a que se retome el control de la vida en niños, adolescentes y adultos. Se puede limitar el no uso de celulares y otros dispositivos antes de ir a la escuela, para que esto no afecte la hora de llegar a la escuela.
Otra regla puede ser no usar los dispositivos electrónicos mientras comen. Ir a la mesa de manera tradicional y que sea un espacio para hablar acerca del día que ha tenido cada miembro de la familia u otra temática que se defina.
Fijar un horario para dormir y prohibir que vayan a la cama con dispositivosvportatiles.
Cada familia puede discutir estas reglas generales con sus hijos y definir otras como establecer un horario específico sin dispositivos y estimular que los niños y adolescentes realicen actividades al aire libre: deportes, la playa, montañas, viajes, etc.
La falta de reglas estimula que nuestros hijos sean desorganizados y que actúen sin responsabilidad en el sistema familiar. Hay que procurar que los hijos conozcan y dominen la tecnología y que aprendan a darle un buen uso y que apliquen lo aprendido para su crecimiento humano y para mejorar a la sociedad en sus relaciones humanas, laborales y familiares.
El autor es médico Terapeuta Familiar
