POR RAFAEL MENDEZ
(Periodista-Diputado)
Con su artículo publicado en el Listín Diario bajo el título “mañana, todo será distinto”.
Tony rememoraba el título del poema “Mañana, Mi Hijo, Todo Sera Distinto”.
De la pluma del poeta revolucionario nicaragüense Edwin Castro Rodríguez, asesinado por la dictadura Somoza., tras años de tortura en la cárcel.
Me regodee positivamente porque he estado pronunciando el título del poema, pero no recordaba el autor ni las circunstancias en las que lo había escrito.
Lo recordaba como nostalgia de los sueños, utopías y esperanzas cuando estudiaba en la UASD.
De los sueños, utopías y esperanzas de las que no hemos renunciado.
De los sueños, utopías y esperanzas de los fundadores de la República, de Manolo, Caamaño, Juan Bosch, de los muchachos abaticos físicamente el 12 de enero del 1972.
Y de todos los que soñamos patria.
“Lo que importa no es el número de armas en las manos, sino el número de estrellas en frente”, pronostico Amaury German Aristy.
