Tomado de n.com.do
SANTO DOMINGO: El Seguro Nacional de Salud (Senasa) firmó el 28 de febrero de 2025 un contrato con la empresa Farmacard SRL para la provisión de medicamentos ambulatorios a los afiliados del régimen contributivo, pensionados y jubilados, en un acuerdo que implicaba el manejo de más de RD$11,304 millones en tres años.
Suspensión del contrato
Tras analizar el caso, la Dirección General de Contrataciones Públicas (DGCP) declaró que el contrato violaba la Ley 340-06 de Compras y Contrataciones, al ejecutarse de manera directa sin un proceso competitivo y bajo la figura de una PSS sin aval del Ministerio de Salud.
Por estas razones, el organismo dispuso la anulación del contrato entre Senasa y Farmacard SRL, aunque permitió que permaneciera vigente por 70 días hábiles, con el objetivo de no afectar la entrega de medicamentos a los afiliados.
Un contrato multimillonario
El documento establecía un pago per cápita de RD$168 pesos por afiliado, lo que incluía a 1,765,266 miembros del régimen contributivo y más de 105,628 pensionados y jubilados. En total, representaba RD$314 millones mensuales, unos RD$3,768 millones al año y RD$11,304 millones durante los tres años de vigencia.
El acuerdo contemplaba además una renovación automática por tres años adicionales, lo que duplicaría la suma y consolidaría un negocio que podía superar los RD$22,000 millones.
Funciones delegadas a Farmacard
El contrato trasladaba a Farmacard responsabilidades que hasta entonces correspondían a Senasa. Entre ellas se incluía el pago directo a las farmacias de la red, lo que significaba que las facturas de medicamentos serían procesadas y cubiertas por la empresa privada.
En su artículo séptimo, se establecía que “todos los prestadores farmacéuticos de la red someterán sus facturas a través del PSS contratado y, luego de ser auditadas, estos valores serán pagados directamente por el PSS a las farmacias que hayan facturado”.
Asimismo, Farmacard asumía el control del límite de cuotas de medicamentos de cada afiliado, un aspecto sensible que habitualmente estaba bajo la supervisión directa del seguro estatal.
Irregularidades detectadas
Aunque el acuerdo presentaba a Farmacard como una prestadora de servicios de salud (PSS), la empresa no contaba con aval del Ministerio de Salud Pública para operar en esa condición.
El contrato, en realidad, configuraba un mecanismo tecnológico y financiero destinado al control y administración de costos de los medicamentos mediante la plataforma MEDINET, lo que contradice la naturaleza de una PSS.
Esto permitió que el contrato se ejecutara como contratación directa, sin licitación pública, lo que representa una violación a la Ley de Compras y Contrataciones, al limitar la libre competencia, la equidad y la transparencia.
Antecedentes del conflicto
Previo a la firma con Farmacard, Senasa mantenía un acuerdo vigente con la empresa DNH Digital Health Network SRL para gestionar autorizaciones de medicamentos, válido desde julio de 2020 hasta junio de 2025. Sin embargo, este contrato fue cancelado en marzo de 2025, tres meses antes de su vencimiento.
Pese a esa cancelación, Senasa suscribió de inmediato el nuevo contrato con Farmacard bajo condiciones cuestionadas.
Impacto económico
El convenio con Farmacard se sumaba a otros contratos adjudicados en años recientes bajo esquemas similares: atención primaria en el régimen subsidiado a Punto Médico Familiar-Khersum por RD$3,770 millones, servicios de telemedicina por RD$290 millones y odontología a Salud Bucal SRL por otros RD$290 millones.
En total, estos compromisos superaban los RD$4,350 millones entre 2021 y 2025. Con el contrato de Farmacard, el monto ascendía a más de RD$15,650 millones en fondos públicos destinados a empresas privadas vinculadas al sector salud.