Las zonas más impactadas incluyen las colinas donde se origina el arroyo de Guasuma, así como el sector 30 de Mayo llamado así por la cañada que lo atraviesa y Santa Rosa, en la parte suroeste del municipio. Según el alcalde, las calles de la zona, algunas de ellas construidas sobre antiguas cañadas y con infraestructura insuficiente, quedaron completamente anegadas, llenas de lodo y con perdidas en muebles, camas y electrodomésticos.
Otras comunidades, como Cañafístol, también sufrieron daños, aunque con menor impacto. Además, se reportaron caminos vecinales y carreteras sin asfalto seriamente dañados, especialmente en áreas montañosas del municipio.
No hay víctimas fatales
A pesar de la magnitud de las inundaciones, no se registraron víctimas ni personas desplazadas, aseguró el alcalde. “Gracias a Dios no hay heridos ni fallecidos. Las pérdidas fueron únicamente materiales”, afirmó.
En cuanto a la asistencia, las familias afectadas han recibido apoyo del Plan Social, incluyendo alimentos cocinados y crudos, mientras que el ayuntamiento realiza un levantamiento detallado de las viviendas afectadas para coordinar ayudas más precisas. Asimismo, se prepara la intervención de la Cámara de Comercio China Dominicana, que realizará operativos en los barrios afectados.
Episodios recurrentes
El alcalde Ramírez destacó que estos episodios son recurrentes en las cañadas del municipio cada vez que se registran lluvias intensas, por lo que se evalúan medidas de mitigación para reducir el impacto en futuras tormentas.
