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Durante el acto de lanzamiento, la primera dama Raquel Arbaje advirtió que el progreso económico no debe construirse “sobre el sufrimiento de nuestros hijos e hijas”, y pidió aprobar con urgencia la ley contra la trata y el tráfico de personas. “República Dominicana no será un lugar para pedófilos. Es un país familiar, comprometido con la protección de su niñez”, afirmó.
Mientras que, la presidenta de CONANI, Ligia Pérez Peña, subrayó que el desarrollo de Cabo Rojo–Pedernales no se medirá solo por el crecimiento económico, sino por la capacidad del Estado para proteger a los menores. Recordó que en la zona, más del 60 % de los niños están fuera del sistema educativo, lo que aumenta su vulnerabilidad frente a la explotación.
El director del Fideicomiso Pro-Pedernales, Sigmund Freund, anunció que Cabo Rojo será el primer destino turístico del país con protocolos de protección infantil y un plan de acción para prevenir abusos. Adelantó además la construcción del primer parque dedicado a la recreación de la niñez y la adolescencia en la región.
El proyecto contempla la creación de una mesa técnica local, capacitación comunitaria y la promoción de políticas de “tolerancia cero” en el sector privado. Se estima que beneficiará a más de 4,000 menores y a cientos de servidores públicos, en un esfuerzo por garantizar que el turismo de Pedernales crezca sin poner en riesgo los derechos de la infancia.
