SANTO DOMINGO: El abogado Víctor Eddy Mateo afirmó que la aprobación acelerada de la reforma al Código Procesal Penal (CPP) evidencia “presiones indebidas” y un proceso legislativo improvisado que, según dijo, podría llevar nuevamente el articulado ante el Tribunal Constitucional.
El jurista hizo estas consideraciones durante su participación este jueves en El Sol de la Mañana, donde criticó el manejo del Congreso y la influencia del Ministerio Público en la discusión del proyecto.
Mateo expresó “pena y vergüenza” por la forma en que ha avanzado la iniciativa, recordando que la sentencia 0765-2024 del Tribunal Constitucional dio un plazo hasta el 11 de diciembre para que la nueva ley fuera aprobada correctamente como ley orgánica. Advirtió que, si se mantiene el procedimiento actual, el texto volverá a ser cuestionado constitucionalmente y podría reproducir la misma inestabilidad del Código Penal, que también enfrenta múltiples impugnaciones.
“Nada que se haga rápido y bien sobra, pero lo que ocurrió ahora cambiar un texto votado la noche anterior demuestra un nivel de incidencia que no fortalece la institucionalidad”, señaló.
Respaldó las denuncias del diputado Eugenio Cedeño sobre cabildeos nocturnos y cambios improvisados: “Cedeño tiene toda la razón esta vez, no somos muchachos para que nos impongan cosas en el hemiciclo”.
Sobre el Tribunal Superior Electoral: “Tienen una nueva oportunidad”
Mateo evaluó además la reciente decisión del Consejo Nacional de la Magistratura, que ratificó a tres de los jueces del Tribunal Superior Electoral (TSE) y sustituyó a dos magistradas.
Aunque recordó errores pasados como intentar aplicar un reglamento con fuerza de ley y la intervención en elecciones del Colegio de Abogados, sostuvo que el TSE “luce más sereno” y que este nuevo período debe aprovecharse para corregir esas fallas.
“Ojalá que no vuelvan a cometer los disparates del pasado. Ya tienen madurez y una nueva ley que les da herramientas”, afirmó.
Renovación en la Suprema Corte: “No sorprenderá lo que ocurra”
El abogado consideró probable que el presidente de la República influya directamente en la escogencia de los jueces que faltan por evaluar en la Suprema Corte de Justicia.
A su juicio, es tradición que cada presidente deje marcada su impronta en el Poder Judicial. Adelantó que, desde su perspectiva, no cree que el presidente Luis Henry Molina sea ratificado: “No creo que el presidente va a premiar a alguien que no viene de su línea.”
También criticó que, cuando los jueces son designados por el poder político, no cuestionan el proceso; pero cuando no son reelectos, denuncian exclusiones.
Designaciones y afinidades políticas: “No es un pecado tener simpatía”
Mateo defendió que los funcionarios o candidatos judiciales puedan tener afinidades políticas, siempre que no utilicen sus cargos para militancia activa.
Citó el caso de la joven jurista Yorlin Vásquez, subdirectora jurídica de la Dirección de Impuestos Internos, como ejemplo de profesional talentosa que, pese a ocupar un cargo político, tiene méritos propios: “Aquí hay gente muy preparada. Lo criticable sería hacer política desde el puesto, no tener simpatías.”
Reforma al CPP: “El Congreso no debió esperar al último momento”
Al retomar el eje central de su intervención, Mateo insistió en que la modificación del Código Procesal Penal debió manejarse con tiempo, y no en medio de presiones y plazos fatales.
Recordó que el Congreso tuvo un año para atender la sentencia del Tribunal Constitucional y no actuó hasta las últimas semanas: “Se dejó todo guardado y ahora se improvisa”.
Advirtió que tanto el Código Penal como el Código Procesal Penal podrían terminar nuevamente en los tribunales por errores en su creación:
“Más de 60 artículos del Código Penal están siendo impugnados. Con este CPP pasará lo mismo.”
