POR JOSE ALCANTARA.
Para Ecos del Sur.
El comité Regional Sur “José Stalin” del Movimiento Popular Dominicano (MPD- Marxista Leninista), se había expandido a toda la región del Suroeste, fundamentalmente a las zonas de Vicente Noble, Tamayo y Neyba.
Todos los compañeros para ese tiempo del año 1975, predicábamos la revolución del campo a la ciudad y logramos llegar a esos pueblos a través de células campesinas revolucionarias. Pero por razones de seguridad teníamos prohibido llegar hasta la Descubierta, Jimaní y Duvergé. Se tenía el temor de que las fuerzas represivas apresaran a algún camarada en esos lugares y lo desaparecieran.
También nos habíamos expandido hasta el Municipio de Enriquillo, donde se había organizado una célula comunista de nuestra organización, pero no se podía ir a pedernales. La zona fronteriza estaba vedada para nosotros por el caso Henry Segarra, cuadro regional del MPD desaparecido en la Provincia de Dajabón.
Esos lugares fueron aprovechados para obtener casas de seguridad, que eran utilizadas para esconder a los miembros de nuestra organización que estaban siendo perseguidos en algunas de las zonas urbanas del país.
Esos lugares fueron aprovechados para obtener casas de seguridad, que eran utilizadas para esconder a los miembros de nuestra organización que estaban siendo perseguidos en algunas de las zonas urbanas del país.
El día 15 de febrero de ese mismo año, la policía represiva y asesina del régimen Yanqui Balaguerísta había apresado al valeroso cuadro de nuestra organización revolucionaria Juan Pablo Pelayo Feliz e inmediatamente lo desaparecieron y hasta el día de hoy no se sabe donde esta su cadáver.
Pelayo Feliz, fue uno de los mentores de la expansión emepedeista a todos esos lugares, cuando la represión se hacia mas dura y los asesinos del gobierno del presidente Joaquín Balaguer se convirtieron en monstruos de la maldad y en verdugos de los miembros de la izquierda revolucionaria
Ese mismo año, el 17 de marzo, en una acción catalogada por todo el pueblo Dominicano como monstruosa, fue asesinado por miembros de la Fuerza Aérea Dominicana, el periodista y miembro del Partido Comunista Dominicano (PCD), Orlando Martínez, quien se había dedicado a denunciar las mentiras y componenda de la oligarquía criolla y el gobierno, quienes confabulados, le negaban la tierra a los campesinos.
Ese mismo año, el 17 de marzo, en una acción catalogada por todo el pueblo Dominicano como monstruosa, fue asesinado por miembros de la Fuerza Aérea Dominicana, el periodista y miembro del Partido Comunista Dominicano (PCD), Orlando Martínez, quien se había dedicado a denunciar las mentiras y componenda de la oligarquía criolla y el gobierno, quienes confabulados, le negaban la tierra a los campesinos.
También el 6 de junio, los guerrilleros Claudio Caamaño, Manfredo Casado del Villar y Toribio Peña Jaques, entraron al País para iniciar un nuevo foco en las montañas de la provincia de San Cristóbal. Esto trajo consigo una fuerte represión que afecto fundamentalmente a los dirigentes estudiantiles de la época, quienes en todo el país salimos en grandes movilizaciones de masas a denunciar la represión de la Tiranía Balaguerísta.
La nación se encontraba en una profunda crisis económica, el gobierno había decretado que solo se vendiera gasolina hasta las 9 de la noche y prohibió la venta de combustible los domingos y los días feriados, provocando una situación calamitosa en toda la industria nacional y los vehículos del transporte. A mediado de junio se vivía una tensa calma, no había agua ni luz en gran parte del territorio nacional.
La nación se encontraba en una profunda crisis económica, el gobierno había decretado que solo se vendiera gasolina hasta las 9 de la noche y prohibió la venta de combustible los domingos y los días feriados, provocando una situación calamitosa en toda la industria nacional y los vehículos del transporte. A mediado de junio se vivía una tensa calma, no había agua ni luz en gran parte del territorio nacional.