POR ANIBAL MEDINA
Para ECOS DEL SUR
Por primera vez en la historia nuestra, un presidente enfrenta de manera valiente y decidida el gran poder extranjero para distribuir las ganancias y ponerlas al servicio de los que menos pueden como lo hizo, Danilo Medina, con el tema de la Barrick Gold.
No tenemos conocimientos de otras experiencias, donde el primer mandatario de la República Dominicana, se haya comprometido personalmente desde la misma presidencia a servirle de garante, como jefe de Estado y de gobierno a los que nada tienen como lo hace el presidente Medina, en cada una de sus visitas sorpresas, facilitándole así las condiciones para convertirlos en entes productivos.
No hay referencias en el País de otros intentos revolucionarios, con la voluntad, intensidad, y decisión como es el tema consumado que encara a favor de la educación el presidente de la República Dominicana, Danilo Medina.
En este párrafo quiero decir que el matrimonio entre, Danilo Medina Sánchez, y la gloria ya están consumado porque la página en blanco que lo separaba ya está llena de contenido como lo que he mencionado y más.
Cosas estas que caben dentro de la expresión “novedad”, en el accionar gubernamental o mejor dicho como debe ser o parafraseando al presidente “son de las cosas que nunca se han hecho”.
Así como el alto nivel de confianza en su pueblo expresado en una reducción sensible de su seguridad en cada una de sus visitas comunitarias que lleva acabo el primer mandatario de la nación y como consecuencia un nivel de aceptación o popularidad insólito que en estos momentos alcanza la categoría de nacional e internacional.