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viernes, 21 de abril de 2017

TAMAYO: Animales estudian junto a niños y niñas en escuela que tiene 16 años construyéndose

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Por Benny Rodríguez

Honduras.-  Quienes viven en esta apartada comunidad, ubicada entre montañas y tierras fértiles que dan frutos, creen que no son seres humanos, porque no logran entender porque tanto desprecio y poca importancia le tienen a ellos.

Sus residente tienen la imprensión que el poblado, con minas de yeso, que una familia poderosa quiere, han sido sacados del mapa. Es otra forma de ellos definir por qué tanto abandono a las mil 700 familias que habitan el poblado.

Sienten vergüenza de no importarle a nadie ni al Gobierno Central que debe accionar colectivamente y en función de las precariedades de cada región del país.

Lo dudan

No conciben que siendo la educación fundamental para el desarrollo de los pueblos, donde las personas pueden lograr liberarse de las ataduras de la ignorancia y conseguir su bienestar, un centro educativo que es clave para conseguirlo, tenga 16 años en construcción, sin que el Ministerio de Educación muestre interés en terminarlo.

La construcción inició con Hipólito Mejía en el año 2000, continuó con Leonel Fernández y ahora con Danilo Medina, quien se ha enfocado en la educación, pero el centro no ha podido ser terminado ni con el 4%.

De ahí que se muestren escépticos a los planes del gobierno de Medina, quien dice priorizar la educación como uno de sus ejes o tareas transversales para alcanzar el desarrollo social, económico y humano en la República Dominicana.

En esta comunidad, que pertenece a Tamayo, provincia Bahoruco, creen que la “Revolución Educativa” del mandatario es solo un concepto abstracto, de “simples” palabras, no hechos “concretos”.

Consideran, “es lo que nos han demostrado en 16 años que tiene la escuela de 5 aulas que está en construcción, sumando los 5 del actual como presidente de la República”.

El centro está listo entre un 60% y un 70%, solo le hacen falta pisos, puertas, ventanas, pañete, mobiliarios e instalaciones eléctricas y sanitarias.

Los padres de los estudiantes y las organizaciones del poblado han reclamado la conclusión de los trabajos de la escuela al Ministerio de Educación, pero la indiferencia ha sido  la respuesta recibida de las autoridades educativas.

Sandra no se cansa de exigir

La situación la expuso a LALUPADELSUR Sandra Suero Méndez, dirigente de la Asociación de Mujeres para el Desarrollo de Honduras “Salomé Ureña”, quien dijo que lo único que le dicen las autoridades es que la escuela está en carpeta.

Contó que han visitado desde el distrito educativo de Tamayo, la Regional 18; de Neyba hasta la propia Presidencia de la República y la sede del Minerd en Santo Domingo, pero no consiguen ninguna respuesta positiva de cuándo sería terminada la escuela.

Como, aseguró, Suero Méndez, ellos viven entre montañas, es que se burlan de esa manera de ellos, pero, advierte que irán a protestar a las ciudades para que le terminen de cionstruir suc entro educativo que lleva casi dos décadas y no se concluye.

La docencia

Entre el olor del estiércol y los orines de chivos y cerdos, los más de 100 estudiantes en edad básica escolar en la comunidad tienen que ir a la escuela a recibir docencia sin las condiciones mínimas adecuadas, por lo que la dirigente campesina afirma que no parece importarle a las autoridades.

“Cuando los niños y las niñas entran a clase en horario de la mañana, salen los chivos y los cerdos, regresan en el recreo y cuando termina la “docencia”. Es insoportable el hedor a orine y al estiércol de los animales”, señaló Méndez Suero.

Además, narró que como el centro no ha sido concluido, en 16 años que tiene en construcción, el centro carece mobiliarios y equipos, por lo que los niños tienen que llevar de sus casas sillas y mesas para poder “recibir” el pan de la enseñanza.

Hasta cuarto grado

Manifiestan que en la comunidad solo se imparte hasta el cuarto grado de la educación básica, por lo que niños y niñas con edades que oscilan entre los 10, 11 y más años, tienen que ir a completar la educación inicial a las comunidades cercanas.

Para completar el octavo curso, el último ciclo de la educación básica e inicial, así como continuar en el bachillerato, los padres de estos tienen que enviar a sus niños y niñas a las comunidades de El Higuito, Fondo Negro y Quita Coraza, distantes a unos 15 kilómetros.

La distancia que tienen que recorrer para conseguir una escuela en donde estudiar, por caminos peligrosos, sobre todo, para personas con la edad citada, no es lo que más asusta a los padres de los alumnos y alumnas, sino el río Yaque del Sur que tienen necesariamente que cruzar para poder llegar a los mencionados poblados.

“Hemos tenido niños que han sido salvados de morir ahogados, de aquí hemos tenido que ir a rescatarlos de las aguas embravecidas del río Yaque del Sur, una situación que para nosotros se torna muy preocupante”, dijo la dirigente de las mujeres de Honduras.

Señaló que son más de 40 niños y niñas, con edades comprendidas entre los 10 y 11 años, o más edad, que tienen que hacer esa travesía peligrosa para llegar a las comunidades adyacentes en donde pueden conseguir una escuela para terminar sus estudios del nivel básico.

Muchos padres, ante la inseguridad que constituye para sus hijos e hijas trasladarse a una distancia muy larga, prefieren que solo completen el cuarto grado que es hasta donde llega los cursos en Honduras y no exponerlos a que mueran ahogados o víctimas de la delincuencia.

Méndez Suero, quien en su conversación con este diario, recibía la ayuda de su marido y de otros campesinos que estaban en su casa tomando un café mañanero, antes de irse a trabajar en sus parcelas, recibía la ayuda de éstos, quienes intervenían diciendo la situación que sufre la comunidad porque no se ha terminado el centro.

Aprovechan para solicitar al presidente Danilo Medina, para que disponga la ampliación del centro y los cursos que se imparten, para que, al menos en la comunidad, los niños y las niñas concluyan el octavo grado.

Señaló que sus hijos e hijas pueden llegar a los 15 años y los padres que prefieran enviarlos a Fondo Negro, El Higuito y Quita Coraza para que concluyan desde el primero hasta el cuarto del bachillerato, “pero ellos tendrían más edad y el riesgo sería menos”.